Han pasado 365 días desde que tembló la tierra en la localidad murciana de Lorca. Una tragedia que se cobró nueve víctimas mortales, 324 heridos, 1.164 viviendas derribadas y daños por valor de 1.200 millones de euros. A día de hoy, 7.500 vecinos de Lorca aún no han podido regresar a sus casas. Las asociaciones y plataformas de vecinos de la localidad afectados por los terremotos del pasado 11 de mayo coinciden en criticar la lentitud en la llegada de ayudas para los damnificados, que llegan "con cuentagotas", un año después de la catástrofe, y reclaman como solución la puesta en marcha "íntegramente" del Plan Lorca, que la administración está sometiendo a un nuevo análisis.
Entre las víctimas mortales de la tragedia se encontraban cuatro mujeres (dos de ellas embarazadas), cuatro hombres y un adolescente de 14 años. Especialmente impactante fue la muerte de Toñi Sánchez, una mujer de 38 años que falleció por proteger a sus hijos de 3 y 6 años del derrumbe de un inmueble.
Fue pasadas las cinco de la tarde del 11 de mayo de 2011 cuando se produjo el primer terremoto de 4.4 grados en la escala de Richter. A ese primer movimiento le siguió un segundo de mayor magnitud, 5.2, el mayor de los últimos 50 años en España, que cambió el rumbo de la ciudad.
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